Está claro que la computación en la nube se ha integrado en muchas de las actividades que realizamos tanto a nivel personal como profesional, y se ha convertido en un servicio informático de primer orden.
Pero, ¿qué es la computación en la nube? El concepto de la Nube o Cloud computing apareció en la década de los 90. Consiste en el procesamiento y almacenamiento de datos en servidores ajenos que alojan la información del usuario a través de internet. Es decir, que lo que normalmente tendríamos almacenado en nuestro ordenador (archivos, programas…) pasa a almacenarse en los servidores que forman la nube. Esta no fue creada para personas especializadas en tecnología informática, por lo que el usuario puede utilizar muchos de sus servicios de manera rápida y sencilla.
¿Cuáles son sus ventajas?
No debemos obviar que hay quien considera que trabajar en la nube puede comportar ciertos riesgos o desventajas. Los ficheros y la información del usuario pasan de estar en el propio servidor a almacenarse en los servidores de la nube, por lo que se cuestiona la falta de privacidad y/o seguridad. Por otro lado, sin internet no hay nube, por lo que el acceso a los programas y datos dependerá del buen funcionamiento de la conexión y de la calidad de los servicios informáticos contratados.